Andreas Faber-Kaiser hace 27 años que nos dijo adiós
Para quien no le haya conocido, fue un ufólogo y escritor de misterio que, sin duda ninguna, hizo escuela en nuestro país.
Andreas, a pesar de su apellido de ascendencia alemana, nació en 1944 en Barcelona y murió el 14 de marzo de 1994 en su ciudad natal.
Obtuvo Premio Nacional de Astronáutica «Julio Marial» en 1972 por su estudio Repercusión de la astronáutica en la vida del hombre. Y en 1976 fundó la prestigiosa revista “Mundo Desconocido» que fue galardonada como Mejor Revista Especializada en 1980.
Además, dirigió su propio programa en Cataluña Radio desde 1988 hasta 1994.
Andreas fue un ejemplo y una inspiración para todos los que le conocimos y compartimos este afán por intentar levantar el velo de Isis, en los temas que podemos decir que son inexplicables, por lo menos hasta el momento.
Andreas fue un investigador infatigable que no se limitó al tema que más le interesaba: la ufología. Sino que fue más allá y se atrevió con temas tan osados como si Jesucristo murió o no en la cruz.
Uno de sus más famosos libros trata el tema bajo el título “Jesús vivió y murió en Cachemira»
O la conspiración que trató de destapar con el libro “Pacto de Silencio”. En él trató el grave problema sanitario que sufrió nuestro país en 1981, supuestamente debido al consumo de aceite de colza adulterado y que produjo la muerte de aproximadamente 1.100 personas y más de 60.000 afectados.
Aunque suene a “conspiranóico”, ese libro molestó a mucha gente. Principalmente, a conocidos organismos e importantes laboratorios a los que denunciaba.
Tras esos acontecimientos, Andreas recibió muchas amenazas de muerte y reconoció en muchas ocasiones temer por su vida.
Poco tiempo después, había contraído el VIH de una forma bastante atípica y misteriosa que ni él mismo se podía explicar, salvo que le hubiera sido inoculado de forma intencionada. Para muchos de nosotros fue un mártir que fue víctima de la divulgación de sus ideas.
Andreas nos dejó a los 49 de edad, pero sigue en los corazones de todos los que le seguíamos y su obra perdura para las generaciones venideras.
